Su periodo vegetativo es de unos 30 días, a partir de ahí comenzará su floración que se alarga durante 45 días, para ser cosechada entre 70 y 75 días después de su plantación.

La mejora en cruces y las selecciones genéticas realizadas en los últimos años permiten la creación de nuevas variedades autoflorecientes con cualidades organolépticas mejoradas y de mayor tamaño, producción y psicoactividad. Otra de sus ventajas es que en exterior pueden plantarse mientras que no haya heladas y en una ventana durante todo el año, sin verse afectadas por el fotoperiodo. Cualquier persona puede cultivar este tipo de plantas fácilmente sin tener que preocuparse de montar un cultivo de interior o de mantenerlas a oscuras durante la noche. Los mejores resultados se darán al cultivarlas entre mayo y septiembre.

Con la suficiente luz y los cuidados adecuados, puede alcanzar los 1,80 metros de altura y llegar a producir hasta 250 gramos de cogollo seco; cotas inalcanzables para otras variedades autoflorecientes disponibles actualmente. Al cultivarla en interior, bajo lámparas, su altura rondará los 80 cm. y la producción por metro cuadrado será de medio kilo, unos 80 gramos por planta.

Genera flores de estigmas pequeños y cálices grandes que forman pesados cogollos, cubiertos de abundante resina, con un olor dulce y lleno de matices. Su sabor es suave y afrutado y su contenido en CBD (cercano al 1%) la hace adecuada para diversos usos medicinales.

THC: 15%.

CBD: 0,9%.

Genética:

• 40% Sátiva – 30% Indica – 30% Rudelaris.

Tipo de planta:

• Autofloreciente feminizada.

Floración en interior:

• 70 – 75 días.

Producción en interior (m2):

• 500 gramos / m².

Floración en exterior:

• Del 1 de Mayo al 31 de Octubre.

Producción en exterior (planta):

• 120 – 250 gramos / planta.